Seguro que has oído hablar numerosas veces sobre la importancia de la indexación web, pero no terminas de entender qué es y cómo se hace. Hoy vamos a explicártelo de una forma simple, para que alcances a comprender la importancia que tiene la indexación para un correcto posicionamiento de tu sitio web en Internet. ¡Sigue leyendo y no te pierdas nada!
¿Qué es y para qué sirve la indexación?
La indexación es el proceso por el cual un buscador rastrea un sitio web, detecta los enlaces que lo componen y usa esa información para crear y actualizar su propio índice.
Cuando solicitamos la indexación de una URL, solo nos queda esperar que el buscador la acepte, lo cual quiere decir que tarde o temprano acabará apareciendo entre los resultados de búsqueda del mismo.
Simplificando, indexar un sitio web quiere decir que este pasa a formar parte del índice de Google –por ejemplo– estando así disponible en su catálogo y apareciendo como un resultado en las páginas de resultados de búsqueda (conocidas como SERP).
Una vez que sabes lo que es la indexación entenderás que, cuando realizas una búsqueda, los resultados que se muestran no aparecen ahí por casualidad. Alguien previamente se ha preocupado de indexarlos y decirle a Google que existen y que tienen algo que ofrecer.
Así es como, gracias a la indexación, podemos obtener esas enormes cantidades de información en apenas unos segundos.
¿Por qué es tan importante indexar para el posicionamiento web?
Como comentábamos previamente, la razón por la que los motores de búsqueda crean su propio índice interno tiene que ver con la capacidad de reacción que les brinda.
De esta forma, son capaces de dar respuesta al usuario velozmente, al contrario de lo que sucedería si tuvieran que buscarlo en toda la Intranet, pues el tiempo de espera se ampliaría considerablemente.
El índice de un buscador se actualiza automáticamente, pero teniendo en cuenta los billones de datos que circulan por la red, no es un proceso tan rápido como nos gustaría. La parte buena es que tiene fácil solución, ya que nosotros mismos podemos forzar la indexación nuestras URL conforme vayamos actualizando nuestra web, ayudándonos de diversas herramientas como Search Console.
Habrás notado que al incluir nuevas páginas dentro de tu sitio web, parece que Google no se da cuenta de ese cambio ya que no las muestra en las SERP. Por eso es importante estar atentos e ir indexando las nuevas URL que nacen en nuestra web conforme las vayamos creando, en vez de tener que esperar a que Google lo haga y estemos perdiendo tráfico por el camino.
Los sitemap. ¿Cómo se organiza la información indexada?
Decíamos que la indexación es el proceso mediante el cual creamos un índice para un buscador. Toda esta maraña de enlaces, se conoce como el sitemap de un sitio web.
Cada URL que vas indexando, pasa a formar parte de tu sitemap, tu mapa de sitio web. Este documento se puede alojar en nuestra propia web, y en él se encontrarán listados todos los contenidos que queremos que los usuarios puedan encontrar, de forma jerárquica.
El sitemap beneficia tanto a usuarios como a motores de búsqueda, ya que facilita el modo en el que accedemos a la información, haciendo accesible la búsqueda de la petición que el usuario realiza al buscador.
Del mismo modo, facilitamos la automatización que antes comentábamos, para que el propio buscador vaya indexando las nuevas URL que nacen en nuestro sitio web.
La consecuencia directa de esto, es que nuestra página web podrá posicionarse mucho mejor, ya que el buscador tendrá perfectamente controlado nuestro sitio web y el contenido que lo compone.
Del mismo modo, el linkbuilding supone una gran estrategia para contar con un sitemap enriquecido e ir subiendo posiciones en los motores de búsqueda. ¡No dejes de utilizarla para llevar tu sitio web al máximo nivel!